Solemne celebración de las Bodas de Diamente
de la Coronación de Nuestra Señora del Valle
El trascendental acto de fe se llevó a cabo el Lunes 8 de septiembre de 1986, en el Valle del Espíritu Santo en honor a Nuestra Patrona la Virgen del Valle.
Las emisoras de la región y varias del centro del país, con cobertura internacional, transmitieron la solemene Eucaristía presidida por el Cardenal José Alí Lebrún Moratinos, arzobispo de Caracas. Más de sesenta mil personas se hicieron presentes en el Campo Eucarístico construido por varios arquitectos e ingenieros de esta región, que ofrecieron sus servicios desinteresados para el logro de lo que fue el acto más importante ocurrido en Margarita en muchos años. El trabajo dispendioso de Monseñor César Ramón Ortega Herrera, para entonces obispo de Margarita y los demás sacerdotes de la región, así como los jóvenes seminaristas demostraron lo que se puede realizar, cuando se trata de llevar la verdadera imagen de lo que es y representa nuestra Virgen del Valle. Conmocionados, muchos feligreses pudieron ver y sentir la fe de los nuestros ante la presencia de la Patrona de las Fuerzas Navales de Venezuela y guía de los Pescadores el 8 de septiembre 1986.
La carroza que trasladó a Nuestra Señora del Valle, al campo eucarístico para la solemne celebración de las bodas de diamante representa a una gruta.
La imagen de Nuestra Señora del Valle fue trasladada desde su Santuario hasta el Campo Eucarístico donde el Cardenal José Alí Lebrún la coronó ante la multitud de feligreses que se hicieron presentes durante los oficios religiosos a efectuados el lunes 8 de septiembre 1986. La carroza fue construida por don Antonio Aspite, con la asesoría de sus empleados los que pusieron todo su empeño en realizar un trabajo de verdadera tradición margariteña.
Son estas personas y otras que quedan en el anonimato, porque así lo quieren, Quienes demostrando con fe inmensa en Nuestra Señora del Valle, se Abocaron a buscar la mejor manera de que estas celebraciones tuvieran El esplendor deseado.
Los trabajadores de la empresa Diraspi, pusieron todo su empeño en hacer una obra de arte como demostración de veneración a su Virgen Marinera, y por ello no escatimaron esfuerzos en realizarla lo mejor posible. Por su parte doña Irene va de arriba abajo buscando los adornos que se requieren para la terminación de esta bella gruta donde viajara la Virgen hasta el Campo Eucarístico donde será coronada.
La corona de las Bodas de Diamante de nuestra Señora del Valle
